Individual’s personal blog that will be useful for all those who want to keep in contact wherever I go / Blog personal de un individuo que será útil para todos aquellos que quieren tener contacto donde quiera que voy

30 jun 2007

The Wolfson College

Ya lo dice la sabiduría popular: no hay mal que cien años dure. A pesar de la decepción por la no-visita de Richard y su hijo, preferí seguir con alguno de los planes que tenía. Para el sábado 23 al mediodía había quedado con Nico -Nicholas-, un compañero de trabajo mitad balear mitad escocés. Lleva muchos años en Oxford y es todo amabilidad, además de perfectamente bilingüe, así que las otras dos voces españolas de la empresa me lo señalaron como un guía perfecto para conocer esta ciudad. La idea era juntarles porque, además, Nico es osteoarqueólogo y Richard antropólogo, así que imaginé que se lo pasarían bien hablando de sus moviditas de huesos y cadáveres. Pero cancelados estos planes, acepté su invitación para ir a una summer garden party (una fiesta de jardín de verano) en su College: el Wolfson.

El College es como una residencia enorme tanto para estudiantes como para doctorandos, post-doctorados, profesores, investigadores y toda clase de especimenes que habitan el mundo académico. No sé cómo son los demás, pero Wolfson me encantó: zonas de relax, pequeños apartamentos, viviendas familiares, biblioteca, zonas de estudio, discoteca, embarcadero, elegantes salones, amplio comedor, unos jardines preciosos, un edificio moderno... Esto es la vida académica de una de las ciudades universitarias más famosas del mundo.


Nico juntó a un grupo tan diverso como interesante de amigos: una arqueóloga suiza, otra griega, un inspector de policía de Londres, un profesor de filosofía ya cincuentón, un alemán que sabe algo de español y algo más de catalán, el propio Nico y yo mismo. Pasamos una tarde muy entretenida charlando a pesar de que la lluvia aguó un poco la summer garden party. Había una pequeña tómbola, pasteles caseros, bebidas, dulces, música, batidos, helados... todo benéfico. Nos sirvió para conocernos un poco y todos hablábamos con todos. Entonces la lluvia paró y nos fuimos a hacer una de las cosas más típicas de Oxford: “punting”. El punting es una forma de navegación de recreo que se hace en unas barcas estrechas y muy largas empujadas por un palo muy largo que apoyas en el lecho del río para coger impulso, digamos que punteando el fondo. Además tomamos la bebida típica para hacer esto: el pimms. Fue muy divertido y relativamente fácil, al menos la teoría... A la hora de navegar yo fui incapaz de avanzar diez metros en línea recta a pesar de las explicaciones y los aspavientos de Nick, el profesor de filosofía y gran maestro del punting: “¡A la izquierda, a la izquierda! ¡No! ¡Ahora recto, todo recto! ¡Pero qué haces! No saques aún el palo del agua, úsalo como un timón ¡Ahora hay que dar la vuelta!”. ¡Qué vergüenza pasé! Pero él se lo tomó bien y fue muy paciente. Luego ya fui mejorando. Te incluyo alguna foto para que te hagas una idea de qué es esto de puntear.


Tanto navegar nos despertó el hambre, y lo que iba a ser pasar la tarde en una summer garden party acabó en irnos a cenar a un chino de buffet. Fuimos a uno que mis antiguos compañeros de casa, el matrimonio chino, me habían recomendado (¿nunca te han entrado ganas de preguntarle a un chino por un buen restaurante chino en tu ciudad? pues yo lo hice, y me recomendaron ese). Tuvimos una cena muy agradable e interesante, de nuevo todos hablando con todos sobre mil cosas distintas: desde el problema del alcohol y los jóvenes hasta que si tu dentista no te gusta yo te recomiendo uno.


Tras la cena hubo algunas despedidas, pero el resto del grupo no nos desanimamos sino todo lo contrario: nos fuimos a la fiesta que había en la pequeña discoteca del Wolfson College. Fue divertidísimo porque el sitio es pequeño, con la gente justa, sitio para sentarte, bebida baratísima (l@s camarer@s son voluntari@s del College), nadie o casi nadie fumaba, la música no estaba mal (a ratos incluso era buena porque Nick le aconsejaba al disc jokey qué poner) y seguí conociendo a gente interesante, como una japonesa muy simpática y marchosa que le gustó mucho lo que le conté de mi viaje a Japón del año pasado. Yo creo que el 80% o más de los que allí estábamos éramos extranjeros. Me presentaron gente de al menos 9 continentes, o yo qué sé, joder, ¡había gente de todos lados! La fiesta terminó pronto en la discoteca, tiene sus normas, como todo. Pero siempre hay algún arriesgado voluntario que ofrece su apartamento para que continúe allí la after party (después de la fiesta). También estuvo bien, más tranquilo, pero fue interesante ver aquello. Yo me reí mucho con Lars, el alemán que sabe español y catalán. Decía todo el rato: “mira eso, ¡hazle una foto para tu blog!”. Al final estábamos cansadísimos y volvimos a casa en taxi.


Desde las 15:30 que me encontré con Nico, Lars y la chica suiza, hasta las 3:30 que llegué a casa, me lo pasé tan bien, pero tan tan bien, que la sonrisa me duró todo el día siguiente.

Nico me ayuda un poco con el remo. Al fondo puedes ver la barca "capitaneada" por Nick.


Aquí estoy yo, en plena acción, a todo punting. Esta foto la tomó Fabien, la arqueóloga suiza.









Como te decía, en esa fiesta había gente de muchos lugares. Esta foto la incluyo con el consentimiento de tod@s l@s que aparecen. Somos 7 personas y sólo dos repetimos nacionalidad (y eso que Nico es medio escocés). Aquí hay gente de Alemania, Inglaterra, España, Japón, Letonia y Bulgaria.

26 jun 2007

Bienvenido, Mister Marshall

¿Has visto esa película española, dirigida por Berlanga allá por los ’50, sobre un pueblecito en el que se espera con ansia y alegría la visita de unos americanos? Se pasan todo el tiempo de preparativos: decoran el pueblo, se inventan una canción, buscan entretenimiento para ofrecer... y al final los americanos pasan de largo... y la ilusión puesta se desvanece... y todo vuelve a ser como antes tras lo que pudo ser y no fue. Entonces te da pena ver como esos pobres ‘catetos’ de pueblo se quedan con cara de tonto, con la misma que tengo yo ahora solo que a la mía se suma la pena.

Para el pasado jueves yo esperaba, también con ansia y alegría, la llegada de mi primera visita: un amigo americano que venía con su hijo. Según el plan llegaban a Londres desde Los Ángeles y luego directos a la estación de Oxford justo a tiempo para que fuera a buscarles después del trabajo y acompañarles al hotel. Me confortaba especialmente recibirles porque es de agradecer que, de dos días que iban a pasar en el Reino Unido, quisieran venir a verme a mí, con todo lo que hay para ver en este país. Como estarían tan poquito, ya había pensado un montón de cosas para aprovechar el tiempo y la compañía: lugares para visitar, sitios para ir a comer bueno-bonito-barato, gente interesante para presentarles... Incluso gasté (gustosísimamente) un día de mis vacaciones para poder estar más tiempo con ellos el viernes. Sin embargo, tal visita al final no llegó debido a unos repentinos problemas de salud: mis ilusiones con los americanos se esfumaron como las de los pueblerinos de la película.

Así que por eso en mi cara de tonto se acomoda también la pena. Tendré que esperar no sé cuánto tiempo más para poder volver a verle. Al menos aquellos pueblerinos no conocían a sus americanos.

16 jun 2007

Adios con el corazón

Hola visitante. Escribo sólamente para decirte que hoy sábado 16 de Junio me cambio de casa. Estoy muy contento por el sitio al que voy y la gente con la que viviré pero por otra parte me da pena dejar a Vanessa y Chao. Ayer hablando con ellos les conté que mi hermana mayor dice que en vez de una pareja occidental que adopta una niña china, esto parece una pareja china que me ha adoptado a mí, ja ja ja. Les hizo mucha gracia, sobretodo a él (a ella le costó un poco más cogerlo y se lo tuvo que explicar él en chino pero luego dijo que sí, que me adoptaría y que me adora, ja ja ja).

Chao me ayuda con el traslado del equipaje y ha cancelado su badmington de los sábados (de 13:00 a 18:00, es un máquina) para llevarme después de comer. Además, como ellos se van pronto a su nueva casa, se han comprado un montón de cosas nuevas, muebles, etcétera. Así que cualquier cosa de esta casa que me quisiera llevar me la han regalado o vendido muy barata (yo les decía que me lo estaban dejando a precio de China y se reían) porque así se lo quitan de encima y yo no me tengo que gastar mucho dinero (Vanessa odia que la gente gaste dinero inútilmente, cuando me manda un mensaje al móvil para algún recado siempre me pone: "¡y no necesito respuesta!").

Me alegra un poquito también haberme podido despedir del hombre en bici del chubasquero y el gorro amarillo (aunque ya no lleva ni gorro ni chubasquero por el calor sino un chaleco amarillo de alta visibilidad, como mucha gente que va en bici aquí). Ayer, cuando me lo crucé por última vez le grité: "¡Mañana me mudo así que adios!". Y él me contestó: "Vale, ¡nos vemos!". ¡Qué tipo! Je je.

Es posible que durante los próximos días esté un poco desconectado de internet porque en la casa a la que voy aún no tenemos instalado el router inalámbrico. Paciencia con el blog y el correo electrónico si no contesto enseguida, ¿Vale? Además, el jueves recibo mi primera visita y estoy muy contento también con eso. Un amigo antropólogo de los Estados Unidos, profesor en la Universidad de Reno -Nevada-, viene con su hijo un par de días. Tiene que ir a Vitoria para continuar un estudio que comenzó el año pasado pero antes se pasa por Inglaterra y como les apetecía ver otra ciudad que no sea Londres (donde piensan parar a la vuelta) les sugerí que viniesen aquí. Bueno visitante, todo esto es mi plan para los próximos días. ¡Te dejo ya porque aún no he empezado a empaquetar!

13 jun 2007

Donde todo el mundo sabe mi nombre

Aquí, en el Reino Unido, de una forma muy informal, valga la redundancia, se utiliza mucho la palabra cheers para decir gracias en lugar de thank you (además de para brindar). Y aquí, en mi blog, es donde vengo a menudo a encontrarme contigo, visitante. Aquí, donde todo el mundo sabe mi nombre y por eso me siento tan a gusto como en casa cuando escribo y cuando leo. Así que: cheers!!

Hacer tu camino en el mundo de hoy requiere todo lo que tienes. Making your way in the world today takes everything you've got.
Tomarte un descanso de todas tus preocupaciones, seguro que ayudaría mucho. Taking a break from all your worries, sure would help a lot.
¿No te gustaría huir? Wouldn't you like to get away?
A veces quieres irte. Sometimes you want to go
Donde todo el mundo sabe tu nombre, Where everybody knows your name,
y siempre se alegran de que vengas. and they're always glad you came.
Quieres ir donde puedas ver, You wanna be where you can see,
que todos tenemos los mismos problemas. our troubles are all the same.
Quieres estar donde todo el mundo sabe tu nombre. You wanna be where everybody knows your name.
Quieres ir donde la gente sabe You wanna go where people know,
que todos estamos igual. people are all the same.
Quieres ir donde todos saben tu nombre. You wanna go where everybody knows your name.

Where everybody knows your name

11 jun 2007

Dulces sueños

Hola visitante. Ahora mismo tengo una sonrisa en mi cara, mitad alegría, mitad alivio. Después de algunos problemas, decenas de llamadas telefónicas, correos electrónicos, mensajes... y de 10 casas visitadas, por fin he encontrado el lugar que creo adecuado para vivir y me han aceptado (en dos fui rechazado, otra ya estaba ocupada, en los otros seis fui yo el que prefirió no vivir). Se trata de una casa que visité el sábado por la tarde.

Me iré a vivir allí de inmediato, el fin de semana que viene. Probablemente tenga algunos problemas con las comunicaciones por internet pero intentaré seguir cumpliendo tanto con el blog como con el correo electrónico. Dame un poco de tiempo y ármate de paciencia, ¿de acuerdo? Aún no conozco a todos mis compañeros de casa pero te garantizo que, si vivir con una pareja de chinos y un polaco sonaba un tanto raro, éstos tampoco son unos compañeros comunes y corrientes. En las próximas semanas te daré más detalles de ellos y de la casa.

Voy a echar de menos tanto a Chao como a Vanessa y Thomas. Me caen bien y me gustaría seguir viviendo con ellos. Sin embargo, Chao y Vanessa se van a vivir a su nueva casa muy lejos de mi lugar de trabajo y Thomas irá a finales de mes a Polonia para recoger a su esposa y vivir los dos juntos en un apartamento. Cada uno sigue con sus planes, y yo con los míos. De todas formas, espero poder seguir viéndoles de vez en cuando... También echaré de menos al hombre en bicicleta del gorro y el chubasquero amarillo que cada mañana me saluda.

Estoy cansado. Ha sido una semana dura tanto física como mentalmente, pero creo que ha merecido la pena al final en ambos aspectos (ya te contaré lo del trabajo, estoy contento con lo que he hecho estos útlimos días). Es domingo, 22:40, no puedo escribir más, se me caen los párpados porque las últimas 10 noches he dormido poco y mal y el trabajo ha sido de desgaste. Creo que esta semana que entra dormiré mucho mejor. Me levanto a las 6:00 así que me voy a dormir. Buenas noches... aunque leas esto por la mañana.

3 jun 2007

Afriki Cultura


En esta entrada hago de mero difusor de un e-mail que me ha llegado por parte de un conocido. Se trata de Suly, un tipo muy simpático y amable al que conocí hace un par de años gracias a que me ayudó. No me enrollo más, este es el e-mail. Si tienes alguna pregunta, lo que sea, no dudes en ponerte en contacto con él o visitar la página web de la asociación cultural. Es una persona digna de ser conocida, un gran ejemplo.

Hola!
Aquí va el cartel promocional del viaje cultural a Burkina Faso que estamos organizando desde la Asociación Afriki Cultura para este verano.Te agradeceríamos mucho que en caso de que conozcas a alguien que pudiese estar interesado,se lo transmitas también.
Para cualquier consulta sobre precios,fechas etc... estamos disponibles en afrikia@gmail.com y en el teléfono 670 785 773 (Suley)
En breve enviaremos el programa detallado a todos aquellos que lo deseen,sólo tenéis que pedirlo.Muchas gracias por la atención,un saludo

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G.Souleymane Ouedraogo
Asociación Afriki cultura
Pintoreria 68b-3izq 01001 Vitoria-Gasteiz
http://www.afrikicultura.elkarteak.net

Cumplemeses feliz

Sí, domingo 3 de Junio de 2007, ya lo dice el encabezamiento. Hoy cumplo dos aniversarios: 17 años desde que hice la primera comunión (ya ves tú, vaya ilusión, aunque los regalos estuvieron guay) y 3 meses desde que puse el pie en esta nueva etapa. 3 meses... Un trimestre... Es una fecha como para hacer un primer balance de la situación, ¿no? Aunque pensaba hacerlo el día 12 -cuando se cumplan 3 meses de mi trabajo aquí- no creo que las cosas cambien notablemente en apenas nueve días. Además, tengo ganas de hacerlo hoy, ahora, porque todo comenzó el 3 de Marzo a las 2:00 de la madrugada aproximadamente, cuando salí de aquel bar y me despedí de todo.

Estos primeros meses han sido un 'aterrizaje'. Los dos objetivos primordiales se han cumplido de forma satisfactoria:
a) encontrar un sitio donde vivir (aunque se avecinan cambios inminentes, estoy manejando la situación con soltura)
b) asentarme dentro de la empresa

No me costó demasiado acostumbrarme a un sitio al que llamar 'hogar'. Por esa parte estoy contento. Respecto al trabajo, lo que estoy haciendo hasta ahora es fácil y asequible, nada del otro mundo. Llevo ya tiempo aprendiendo el modo de trabajar que tienen aquí, diferente y a menudo erróneo desde mi punto de vista, por lo que algunas cosas las tengo que hacer en contra de mis 'principios' como arquéologo y eso me cuesta. Sin embargo, parece que les gusto y ya me han comunicado que seguiré trabajando en esta empresa de forma indefinida: hasta que yo quiera o hasta que llegue un momento en el que no haya trabajo suficiente.

Sin embargo, estos tres primeros meses no han sido todo lo que yo me había propuesto. Es pronto y aún me queda mucho tiempo (¿cuánto? no sé) pero lo cierto es que los objetivos prioritarios son sólo el 50% de lo que tenía en mente cuando decidí venir: un resultado mediocre. Hay otros más pequeños y también importantes en los que ni siquiera he empezado a 'trabajar' o, si lo he hecho, me he desanimado al primer contratiempo. En Oxford vivo bien y en South Leigh Gill Mill trabajo bien, pero se me ha creado un estado (¿o debería asumir alguna culpa y decir "he creado"?) en el que mi energía y mis ganas de poner en marcha la maquinaria se han visto reducidas hasta la minimización, como si estuvieran narcotizadas. De esas ilusiones que traía en la mochila sólo quedan migajas y me planteo si debo reconstruirlas, retomarlas e intentar lograrlas o si, por el contrario, debería pensar en otras cosas visto el fracaso momentáneo que he tenido en este empeño. Digo momentáneo porque, si ni siquiera he empezado, no puedo decir que haya fracasado completamente...

Así que, aún estando moderadamente contento, no puedo saltar de alegría tres meses depués de llegar aquí porque un paupérrimo 5 (sobre 10) es algo de lo que no puedo estar orgulloso. Es más, a menudo me siento últimamente avergonzado y enfadado, decepcionado conmigo mismo, como el que ha gastado todo el dinero de un mes en una noche de juerga y no tiene ahora para comer o como el que ha dejado a una novia a la que quería desde hace años por egoísmo puro aún a sabiendas de que le haría daño a ella. Le ventaja que tengo yo respecto a ellos es que en mi caso aún queda todo por hacer y sólo depende de mí, la desventaja... también es que queda todo por hacer y sólo depende de mí.